Abdelaziz tiene cuatro hijos en edad escolar que le suponen un gasto de más de 1.000 euros al inicio de curso. (c) Susana Hidalgo
SUSANA HIDALGO // Abdelaziz tiene cuatro hijos de entre 19 y cuatro años que le suponen, en este mes de septiembre, más de 1.000 euros en gastos sólo en libros de texto. “Trabajo haciendo chapuzas, dos meses sí, dos no”, cuenta este marroquí, que lleva 21 años en España y aún espera a que le den la nacionalidad. Abdelaziz, que vive en Madrid, ha tenido que recurrir a un mercadillo de trueque de libros para coger el material escolar que no puede cubrir con sus escasos ingresos. Lo mismo le ha pasado a Sara, o a Laura, madres que han visto cómo después del verano las cuentas no les cuadraban y han tenido que echar mano de la solidaridad para empezar a funcionar.
Como a ellos, a muchas familias les faltan los recursos para poder afrontar los gastos de inicio de curso que, de media, superan los 800 euros por niño, según calculan las asociaciones de consumidores con datos de escuela pública, concertada y privada. La Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (Fuci) señala en un reciente informe que éste es el curso escolar más caro de los últimos diez años.
Ante la subida de los precios de los libros de texto, la escasez de becas de comedor o la ausencia de guarderías, muchas asociaciones se han puesto manos a la obra para suplir con la solidaridad la falta de ayudas públicas a la educación. Estos son algunos ejemplos:
Apuntes y libros de texto
Un grupo de profesores de la enseñanza pública elabora lo que ellos llaman “apuntes del profesor” y se trata de materiales curriculares gratuitos. Los documentos se pueden descargar en la web Apuntes Marea Verde y están cubiertas las áreas de Tecnología, Ciencias Naturales, Lengua y Literatura y Matemáticas.
Una mujer busca libros en el mercadillo de trueque de material escolar que desde Barrio del Pilar en Lucha se ha organizado para ayudar la las familias desfavorecidas. (c) Susana Hidalgo
Además, en distintos centros educativos y asociaciones de barrio están en marcha mercadillos de trueque de libros de texto. Por ejemplo, en el instituto de Benicassim (Castellón) la Asociación de Padres junto con el centro lleva años haciendo un mercadillo de libros de Bachillerato entre alumnos de diferentes cursos que se intercambian los ejemplares. La asociación de madres y padres del IES A Nosa Señora dos Ollos Grandes, de Lugo, hará la iniciativa este jueves jueves 12, de seis de la tarde a ocho, en las instalaciones del instituto. También hay webs especializadas como Changebook que también fomentan la difusión de los libros de texto y asociaciones de barrio reivindicativas que también promueven este desahogo para los padres, como Barrio del Pilar en Lucha.
Guarderías solidarias
Conseguir una plaza en una guardería pública se ha convertido en una misión imposible y para las privadas los precios son demasiado altos para las familias más desfavorecidas (entre 4.000 y 5.000 euros anuales). En total, hay unas 75.000 plazas públicas en escuelas infantiles, que no cubre ni al 4% de la población entre 0 y 3 años. Por eso, en algunos municipios se han puesto en marcha servicios de cuidado de niños a precios más asequibles o incluso gratuitos en momentos puntuales, como una guardería de El Espinar, en Segovia, que ofrece quedarse con los pequeños cuando los padres tengan una entrevista de trabajo y no tengan con quién dejarles. En Bilbao, hay otros centros que ofrecen subvenciones a las familias para comprar productos de bebés.
Llega el momento de comer
Los voluntarios de la parroquia de San Carlos Borromeo, en Entrevías (Madrid) acuden todos los días a las 8 de la mañana al poblado chabolista de El Gallinero para entregar desayunos gratis a los cientos de niños que viven allí. Centros de comunidades autónomas como Andalucía o Islas Canarias dan de desayunar y de merendar a los estudiantes para garantizarse que tienen una buena alimentación.
Mi hija Mar merienda un día tras salir del colegio. (c) Pedro Armestre
En Tobarras (Albacete) Cáritas ha abierto un comedor escolar solidario en un colegio público y donde también se enseña a los niños educación nutricional. Y los vecinos de Llanes, en Asturias, han donado comida a través del Ayuntamiento para las familia más desfavorecidas con hijos en edad escolar.
Actividades extraescolares
El precio medio mensual por niño y actividad extraescolar está entre 30 y 50 euros, un gasto que muchas familias han tenido que restringir debido a la crisis. Pero hay alternativas. En Madrid, La Casa Encendida ofrece un espacio de juegos para niños de hasta cinco años donde se les estimula para la lectura o talleres de medioambiente a precios asequibles. Y en Matadero, del 13 al 15 de septiembre tendrá lugar el I Festival de Cultura Adolescente, con 70 actividades gratuitas relacionadas con la música, la fotografía, las artes plásticas o el deporte. En Barcelona, el museo Macba propone el taller El hemisferio derecho, sobre la parte del cerebro encargada de gestionar las emociones.
3 Comment on “Redes solidarias para afrontar el gasto escolar”
Hernán
19/09/2013 a las 14:14
Cuando los estados dejan de funcionar las redes sociales (las de verdad y no las basadas en internet) comienzan a funcionar.
La solidaridad, la empatía y el compañerismo suplen a un gobierno que deja caer un estado de bienestar conseguido a través de los años.
Buen reportaje y mejor ejemplo a seguir
Raquel García
11/09/2013 a las 23:15
Parece que las iniciativas solidarias empiezan a surgir y con bastante éxito. Hoy mismo, conversando con mi cuñado que pertenece al AMPA del CEIP “La Atalaya” de Palazuelos de Eresma (Segovia), me he enterado de la existencia del Programa de Reutilización Escolar de Libros Texto, «Releo», para centros públicos de enseñanza obligatoria de la Comunidad de Castilla y León (http://www.educa.jcyl.es/es/programas/extension-programa-releo). A través del AMPA del centro se gestiona dicho fondo (donaciones y solicitudes de libros), facilitando libros de texto, e incluso material escolar, a las familias que lo requieran.
Antonia
10/09/2013 a las 13:26
A finales de agosto estuve en Gandesa, un pueblo de Tarragona, y allí la asociación de padres organizaba esa misma actividad dentro de las mismas instalaciones del colegio. La hija de mi amiga había entregado los libros al finalizar el curso y antes de empezar el siguiente ya le tenían preparados los libros para el siguiente que había entregado otro alumno. Creo que es algo que se debería hacer en todos los colegios.
En las instalaciones de La Cruz Roja de la calle Pozas, en Madrid, tienen habilitados unos espacios muy bonitos y agradables para que los niños puedan ir a jugar y hacer actividades gratuitas.
Saludos Calamares.